998 227 3633
Las enfermedades de la región anorrectal son comunes en la población general. Para nada son exclusivas de determinada actividad sexual. Sin embargo, las personas del sexo masculino que tiene relaciones homo o bisexuales son frecuentemente afectados y deben estar informados sobre los riesgos y los cuidados que deben de seguir para disminuir la posibilidad de padecer dichas enfermedades.

Las lesiones más comunes que se presentan en los hombres que tienen relaciones sexuales con otro hombres son de origen infeccioso, como condilomas (Virus de Papiloma Humano), herpes, clamidia, sífilis, gonorrea, etc. También está asociado a presencia de fisuras anales debido al traumatismo durante la penetración sin la relajación suficiente del esfínter anal.    

El VIH también puede condicionar la persistencia de infecciones en el canal anal por el efecto que tiene sobre las defensas de quien lo padece.

La proctitis es la infección del recto por cualquiera de los microorganismos ya mencionados tanto bacterianos como virales o incluso hongos y puede ocasionar síntomas como dolor al defecar, heces con pus o sangre, molestias para sentarse y dolor en la parte baja del abdomen, sensación de querer evacuar y no poder y necesidad de pujar constantemente.

Durante la consulta es importante la exploración visual de las lesiones tanto externas como internas. Una anoscopía para valorar los primeros 5 cm del recto es ideal para poder ofrecer un diagnóstico completo y un tratamiento integral sin dejar pasar por alto lo que no es evidente a la observación externa. Incluso podría ser necesaria una colonoscopía en caso de que durante la anoscopía se encuentren lesiones más altas.

El uso de preservativo es esencial para evitar contagios de enfermedades de transmisión sexual.

Recuerda que existe ya la vacuna para papiloma humano y lo ideal es aplicarla antes de los 26 años. Si eres homosexual acércate a tu médico para evitar que sufras de condilomas en un futuro o cáncer anal. El VPH se ha relacionado con cáncer de ano en homosexuales. También debes aplicarte la vacuna para hepatitis B.

Aunque tengas una pareja “estable” es importante que ambos se realicen exámenes periódicos. Muchas personas no saben si están infectadas o incluso existe un periodo llamado ventana durante el cual una persona puede tener un resultado negativo en los análisis y aun así estar infectado. Se recomienda repetirlo cada 6 meses o cada año dependiendo del número de parejas y la protección usada.

No tengas miedo de acudir con el médico, muchos tenemos un gran respeto y simpatía por la Comunidad LGTB, recibirás atención cálida y humana, sin prejuicios ni estigmas. Tu salud es muy importante y mereces estar bien para poder disfrutar de tu sexualidad libremente.

 En cada acto médico debe estar presente el respeto por el paciente y los conceptos éticos y morales, entonces la ciencia y la conciencia estarán siempre en el mismo lado, del lado de la humanidad

Rene Gerónimo Favarolo

La información proporcionada ha sido planteada para apoyar, no reemplazar, la relación directa que existe los pacientes/visitantes de este sitio web y su médico. Si tiene problemas de salud, consulte a su médico